Andaba yo muy contento anoche con el 3-0 al Galatasaray, pero después de escuchar los comentarios post-partido en la radio, me di cuenta de que tenían razón. El Madrid hizo un partido lamentable. Tenía que haber marcado ocho o nueve goles, puesto que el Galatasaray ha llegado a esta ronda de la Champions únicamente porque le tocó el boleto en una tómbola. No hubo goles desde mediocampo, ni de tacón, ni de espuela, ni siquiera haciendo el escorpión. No hubo una de esas históricas goleadas que todos recordamos de otros años a estas alturas de la competición. No hubo nada... bueno, sí, llegar a semifinales por tercer año consecutivo después de no ser ni cabezas de serie, pero poco más. Desastroso. Esto con Íker no pasaba.
Estoy muy de acuerdo con tu ironia. Los periodistas deportivos son lamentables.Que se fastidien.
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